Shaki, ¡cásate en Barranquilla!

Eres nuestro emblema y orgullo nacional e internacional. Las personas que son íconos artísticos y culturales se deben a su patria y, más específicamente, a su lugar de origen. Barranquilla te vio nacer; estamos celebrando los 200 años de su fundación, somos Capital Americana de la Cultura y, ¡qué memorable sería! que en la agenda de los festejos estuviera la ceremonia de boda de su ilustre hija con Gerad Piqué.
Te aseguro que tus suegros, Joan y Montserrat, la pasarán muy bien y de paso tu marca saldrá fortalecida, tendrá un gran posicionamiento antes y después del matrimonio. Está demostrado que los consumidores y seguidores se conmueven y suelen premiar la lealtad de los artistas que no son indiferentes con sus raíces.
Estoy soñando despierta. Danos el honor de verte entrar de la mano del Sr. William, tu padre, al altar de la Catedral Metropolitana de Barranquilla, rodeando tu cuerpo con encajes y tules ondulantes, blancos como el oleaje de tu Caribe. Ustedes deciden, también podrían casarse en un espacio íntimo, en la Capilla de tu Colegio, La Enseñanza. (Ya hablé con Gustavo, el nuevo rector, y me dijo que sería un goce infinito si así lo desearan).
Me imagino un camino florecido de niños de colegios de la Fundación Pies Descalzos, los hombrecitos con flores de ginesta (típica de Barcelona) y las niñas con cayenas multicolores. Todos ellos irán hermanados vestidos con camisetas del Junior y del Barcelona. La calle de honor irá desde tu casa hasta el altar. Habrá miles de mujeres moviendo sus caderas, ¡romperemos récords mundiales!. Gracias Shaki, porque tú nos enseñaste que las caderas no mienten, eso es verídico. Acá en Barranquilla se vive y se goza de forma auténtica todo el año, el espíritu del Carnaval también lleva tu herencia.
Te prometo que resplandeceremos, quedaremos mudos de alegría al verte salir de la mano del hombre que, con tanto amor, fecundó tus ilusiones y te hizo la madre de ese hermoso solecito primaveral llamado Milan.
Sabemos que andas liada pero tú, tranquila, dedícate a cantarle canciones de cuna al bebé. Todos te ayudaremos, tus admiradores nos darán ideas y juntos desarrollaremos los preparativos de la boda. Ustedes, como pareja y con la familia ampliada, nos irán aprobando y sugiriendo lo que más convenga.
Con el título de esta columna voy a pedir a los lectores de EL HERALDO, mediante encuesta y vínculos en redes sociales, que te envíen sus deseos, que se unan a este llamado con creativas ideas y, lo más importante, con muchos regalos espirituales y emocionales que consoliden la unión.
¡Shaki, cásate en Barranquilla! Sé que tienes un oído fenomenal, sabemos que no te harás la sorda ante esta invitación. Es un reto histórico, dale cariño, visibilidad y gratitud a tu tierra, sabes que nos sentimos muy orgullosos de los dos y que por acá son bienvenidos.
Abrazos cariñosos a Piqué y a tus padres, y besitos con sabor a coco para Milan.

Fuente: El Heraldo