A pesar de la placidez con la que vive la recta final de su embarazo,
la extrovertida cantante sacará su lado más agresivo y competitivo en
su próximo proyecto profesional como coach de la edición estadounidense
de La Voz. La estrella quiere proyectar en el concurso
cazatalentos la misma actitud exigente y profesional con la que maneja
su carrera musical, y ya avisa de que la nueva temporada del formato
televisivo estará caracterizada por "la tensión y la adrenalina".
"Reconozco
ser una mujer estricta en todo lo que concierne al trabajo, y cuando
tengo que ofrecer directrices a mis concursantes me obsesiono
especialmente con los pequeños detalles. Este concurso ha potenciado
mi carácter competitivo, y el programa reflejará muy bien la adrenalina y
la tensión que caracterizan al concurso", explicó la artista en la edición digital de la revista Billboard.
El resto de famosos intérpretes que integran el panel del jurado
-Adam Levine, vocalista de Maroon 5, el rapero Usher y Blake Shelton- ya
han sido testigos del fuerte carácter que irradia la exuberante latina
y, aunque no dudan en alabar sus dotes como mentora, algunos muestran
cierto temor a verse las caras con Shakira en los duelos musicales que
protagonizarán sus discípulos.
"Ahora tenemos a una colombiana embarazada y con las hormonas
disparadas, que está dispuesta a machacar a sus rivales. Shakira no está
de broma, va a ir a por todas", vaticinó Levine en la misma entrevista.
"Shakira es al mismo tiempo una mezcla entre humorista, profesora
exigente y gánster. Es muy simpática y agradable, pero está preparada
para sacar la espada tan pronto como empiece la batalla", añadió Usher,
artista que también debuta en el programa y al que se atribuye el mérito
de ser el descubridor de Justin Bieber.
Fuente: El Economista
jueves, 3 de enero de 2013
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